¿Soy un perdedor o un ganador?: reflexión sobre el éxito y el fracaso como respuesta a "Pollo nalgón"

No es mi costumbre responder ataques personales provenientes de comentaristas en blogs, sin embargo, voy a hacer una excepción en este caso por tratarse de una ofensa que raya con el agravio. 

Hace algunas semanas colgué en Internet una novela que escribí, titulada "La dignidad de los soldados del tiempo dorado", para hacerle publicidad a la obra y para que los lectores tuvieran una guía del escrito abrí un blog, en ese espacio incluí una breve reseña de mi hoja de vida, un resumen de la novela, y las páginas donde se puede descargar gratis el escrito.

Días atrás, una blogger anónima autodenominada como Abambtia, emitió una crítica un tanto subida de tono, sin embargo, la cosa no pasó a mayores porque respeto las posiciones personales, y porque en últimas no se enfocaba tanto en el autor de la obra como sí en la novela misma. En los últimos días apareció en el blog mencionado un comentario proveniente de un comentarista anónimo autodenominado como "Pollo nalgón", en el cual compartía la crítica de Abambtia y, de manera desconsiderada, entraba a hacerme críticas desde el punto de vista personal.

No me molestan las críticas, de hecho, los comentarios negativos sobre una obra o sobre una actividad le sirven al autor para mejorar su arte, sin embargo, una cosa es una crítica sobre un escrito y otra muy distinta es insultar a su autor tal como lo hizo el autodenominado "Pollo nalgón".

El comentario del anónimo personaje es de este talante:

"Esta es la crítica más graciosa y más acertada que he leído en mi vida, ya que desenmascara a un egolatra friki como Bermudez: Un perdedor con aires de rockstar que tiene mas de 5 blogs que nadie lee pero que él pretende hacer pasar como la palabra de Dios.

A esto hay que agregar la manera ta cómica de atraer clientes para que pauten en esos blogs, sin contar sus proyectos de conferencias empresariales sobre introducción al derecho para empresas y de blogs corporativos: un monumento a la obnubilación de los individuos que creen que escribir blogs es llegar a playa alta.

Conclusión: Bermudez es un viejo ridiculo que no ha superado la adolescencia, y esta crítica lo reflejó demasiado bien, tanto que sospecho que esto es un intento del viejo por atraer la atención de su puerca novela.

Se despide de ustedes su amigo: Pollo Nalgón, invitando cordialmente a Bermudez a que vaya a un psiquiatra y entregue el ojete de una vez por todas, que eso es lo que le hace falta."

Como pueden apreciar, la cosa va dirigida a insultar al creador pero no a la creación, de la misma forma y tal como lo hiciera Abambtia, utilizan el anonimato para arropar sus posiciones, lo cual me parece un tanto cobarde, y de cierta forma, demerita sus posiciones por ser emitidas sin poner la cara. 

"Pollo nalgón" me tacha de ególatra friki, lo que en lenguaje común y corriente sería como decir que yo soy un loco narcisista por el simple hecho de escribir en Internet. No me considero la última Coca-Cola en el desierto por escribir en Internet; simplemente lo hago por ser una herramienta abierta y eficaz para intercambiar opiniones, nada más, no creo que sea mejor o peor que otras personas por el simple hecho de llevar unos blogs. Fuera de eso, la gente que realmente me conoce, sabe que no soy narcisista ni ególatra, y que tal vez tengo el defecto contrario: sufro de falta de autoestima en ciertas ocasiones. 

Sobre lo de perdedor, pues, debo decir que el éxito y el fracaso siempre son relativos. Si medimos el éxito y el fracaso por la cantidad de dinero que tenga una persona, pues todos somos fracasados si nos comparamos con Bill Gates o con Carlos Slim, quienes amasan fortunas de decenas de miles de millones de dólares, pero, si me comparo con gente que vive en la calle o que no tiene dónde vivir tal vez yo soy un súper ganador. El éxito y el fracaso son conceptos relativos, que últimamente se utilizan de manera indistinta para tachar a ciertas personas que no cuadran con nuestras expectativas o con nuestros propios ideales de éxito. A veces pierdo y a veces gano, como todos los seres humanos, ya que ningún ser en la Tierra sólo pierde o sólo gana, porque no sería un ser humano; por lo tanto tacharme de "perdedor" es ignorante y fantasioso. En la sociedad actual se utiliza mucho ese término, fulanito es un perdedor o menganito es un "loser" (perdedor en inglés), y generalmente los que más utilizan estas palabras son los que sufren de complejos de inferioridad. Estas personas con complejos de inferioridad cubren sus deficiencias psicológicas etiquetando a los otros como perdedores o fracasados. 

Señor "Pollo nalgón" no me siento ni perdedor ni fracasado, tengo momentos buenos, momentos regulares, y momentos malos, como todo el mundo, como los debe tener Bill Gates, o Bill Clinton, o Lady Gaga, o como los debe tener el señor que pide limosna en la esquina de su casa. A lo largo de mi vida he ganado, he perdido, y a veces, ni lo uno ni lo otro, como tal vez a usted le ha pasado. Soy una persona en constante evolución, y todos los días me esfuerzo por ser feliz y por hacer feliz a los demás, eso en mi concepto, es ser exitoso.  

Sobre lo de tener cinco blogs, le indico que está equivocado, ya que son más de cinco blogs los que llevo. Y no me creo una "rockstar" por tenerlos, son simples expresiones que hago públicas a través de la Internet como lo hacen muchas personas, que comparten sus ideas, sus estados de ánimos, sus alegrías, sus tristezas, sus esperanzas con otros seres, y que lo hacen escribiendo en unas herramientas denominadas como "blogs", algunos no llevan blogs sino que escriben diarios, o juegan golf, o simplemente beben una cerveza en un bar; yo comparto mis ideas, mis emociones, y mis sueños a través de estos mecanismos virtuales. La cuestión de si tengo muchos o pocos lectores me es indiferente, a los blogueros nos gusta que nos lean, pero si no nos leen nos da igual. En mi caso, varios de mis blogs son seguidos por muchísimas personas, como el blog de filantropía, o el blog jurídico, o los blogs de cine y literatura. Estos espacios reciben visitas constantemente de personas de todas partes del mundo, no sólo de Colombia, sino de todo el orbe, y no lo digo yo, así lo informa la propia página Blogger.com y la página de conteo de visitas statcounter.com.

Lo que digo en los blogs no es palabra de Dios, de hecho, me gusta que personas que piensen diferente comenten en mis blogs, y así lo hacen y lo han hecho muchas personas, sin tener que suprimir el comentario o censurarlo. Eso sí, brindo mi posición, y eso no es transable, los blogs están basados en la libertad de opinión, y eso es un derecho humano esencial que no puede ser coartado ni amenazado en su ejercicio por otras personas o por instituciones. El hecho de emitir una posición personal no indica que el bloguero o articulista se crea Dios, o la mamá del creador; simplemente demuestra que el autor está compartiendo con otros su visión del universo y de la vida sobre un aspecto en particular, y eso no tiene nada de malo, es humano, es aceptable, es el ideal en un mundo libre.

Sobre mis proyectos de atraer pauta publicitaria para mis blogs, mis conferencias, y mis ofrecimientos sobre blogs corporativos, no son más que una forma de usufructuar mi actividad en la Internet, es una salida lógica a mi creatividad, a mi espíritu de creación, y de concesión profesional a una sociedad que pide a gritos nuevas ideas y nuevos servicios, y eso es lo que hago yo, no es más, estoy proponiendo algo más. Si le molesta esto, lo siento, si prefiere pasar su tiempo en actividades diferentes a estas lo felicito, pero yo le informo a usted y a los demás que seguiré explorando nuevas formas de ofrecer servicios por el Internet, y que los blogs son una herramienta de ofrecer estos servicios de manera creativa y activa, aunque a muchos sólo se les ocurre ofrecer lo mismo, lo que ya se creó, o lo que ya existe, por temor a la innovación y al cambio. No creo que por esto esté o me sienta en "playa alta", término que me imagino significa que yo alucino con estar en un plano superior al de los demás mortales. Ya expliqué con suficiencia y con claridad que mi actividad como bloguero no me hace sentir mejor o peor que los demás.

Sobre lo de ir a un psicólogo por mi supuesta inmadurez mental, pues, no hace falta porque yo me autodiagnostico como un eterno adolescente, como un niño chiquito que crece pero que mantiene sus ideales de infancia. Muchas personas de diferentes edades tienen blogs, o escriben cuentos y novelas, y eso no es síntoma de inmadurez o de demencia es muestra de genialidad. Seguiré escribiendo blogs, cuentos, novelas, y muchas otras cosas que sorprenderán a propios y a extraños, no tengo complejos de inferioridad, y tampoco soy un estúpido que le teme a la crítica o a hacer el oso; soy un ser humano que desborda creatividad, que quiere ser feliz para ver feliz a los demás, incluso a usted "Pollo nalgón".  

1 comentario:

Roberto Piazzo dijo...

Roberto Piazzo:

Pacho, aquí te paso los datos desde donde comentó Pollo Nalgón:

Dirección IP: 190.99.158.116

Lugar desde donde realiza el comentario: Cali, Valle Del Cauca, Colombia.

Responsable IP: Juan Carlos Vitta.