¿QUÉ PASA CON LA EDUCACIÓN EN COLOMBIA?

Esta semana se conoció una noticia en los medios de comunicación: un alto número de estudiantes están perdiendo el año en los colegios de Bogotá. Algunos dirán que es normal, que los chinos sean vagos en Colombia no es algo del otro mundo ni tampoco es novedad, sin embargo, muestra la punta del iceberg de un fenómeno que nosotros los profesores estamos captando cada día con mayor fuerza. Se trata de la indiferencia hacia la educación, hacia la cultura, hacia el conocimiento.

Los jóvenes de hoy en día son indiferentes al conocimiento, en algunos casos simplemente no les interesa su entorno cultural y social, y mucho menos el global. Los jóvenes de hoy en día están obsesionados con el placer de las redes sociales por internet, por las rumbas, por los juegos de video, y pare de contar.

No sé si este fenómeno es particularmente frecuente en otros países o no, yo por lo menos conozco el caso colombiano y pienso que es preocupante. Los medios de comunicación inciden bastante en esto, la cultura del ocio, de lo inmediato, de lo estúpido, ha llegado a proporciones vergonzosas. Alguna amiga, alguna vez me dijo que su hijo que no leía, y me pidió consejo para alentarlo a leer, yo le dije que era muy difícil si ella no lo hacía también, que el ejemplo era la mejor forma de estimular la lectura en los jóvenes.

La nueva ministra de Educación de Colombia María Fernanda Campo, habló del problema de las competencias en la radio, y afirmó que los medios de comunicación son co-responsables por la educación de los jóvenes en nuestro país, sin embargo, para los medios de comunicación no es negocio estimular la cultura o el entusiasmo por el conocimiento ya que necesitan vender una pauta publicitaria, y para ello acuden a transmitir programas de sólo entretenimiento.

La cultura de lo estúpido que algunos llaman "light" es una realidad en el mundo, y no sólo en Colombia, sin embargo, en nuestro país cifras como el porcentaje de lecturabilidad (¿así se dice?) son vergonzosas, ya que en Colombia un lector promedio lee dos libros por año, mientras que en Europa un lector promedio lee dos libros por mes.

Las redes sociales ayudan a crear este fenómeno, sin embargo, no le podemos endilgar toda la culpa al internet ya que este sistema simplemente es un amplificador de lo que cada uno tiene en el cerebro, si la persona es estúpida el internet le agrava el problema, y si es inteligente el internet le ayuda a ser más inteligente. Allí estaría el problema, ya que indudablemente las redes sociales en su gran mayoría estarían siendo utilizadas para propósitos estúpidos o inoficiosos, y los jóvenes son las primeras víctimas de esto.

El gobierno nacional debe replantear la estrategia educativa y de cultura, ya que la cobertura es necesaria pero también la calidad y los contenidos deben ser modificados para asegurar que los estudiantes no sólo salgan con un diploma debajo del brazo de los colegios y de las universidades, sino que salgan con habilidades y conocimientos que les sirvan de guía para afrontar la vida con mayor entusiasmo y madurez.

La educación es la base de la sociedad, lo que aprenden los jóvenes es lo que aplicarán como profesionales en distintos campos, y si no aprenden nada o lo aprenden de manera incorrecta no debemos sorprendernos cuando vemos una sociedad enferma de corrupción y de inmoralidad.

Los profesores debemos tomar también cartas en el asunto en el entorno educativo que nos corresponde, denunciar a aquellos supuestos educadores que en realidad son mercachifles de la educación y nada más, o a aquellos educadores de coctel que sólo figuran en las fotos de los eventos sociales pero que no aportan nada novedoso a su campo de responsabilidad educativa.

En el gobierno que empieza, debe darse este debate, la educación no sólo sirve para encontrar empleo sino para estructurar la sociedad, si no hay educación la sociedad se corrompe y el caos está próximo a llegar, ojalá la nueva ministra, la doctora Campo, tenga, y de seguro lo tendrá, la suficiente capacidad para plantear una discusión frente a este tema, donde tanto educadores como aquellos que no lo son, piensen en nuevas formas creativas de formar y educar en un mundo global donde la cultura de lo "estúpido" le está ganando la batalla a la educación "en serio". 

2 comentarios:

José Humberto Plascencia Aguirre dijo...

No solo en Colombia pasa lo que dice usted también en México es la misma realidad y todo porque los mismos padres de familia fomentan la flojera para leer y cuando se les dice lo provechoso de leer en lugar de aceptarlo se enojan. Por esta razón tenemos el tipo de muchachos que menciona al principio del artículo.

José Humberto Plascencia Aguirre dijo...

No solo en Colombia pasa lo que dice usted también en México es la misma realidad y todo porque los mismos padres de familia fomentan la flojera para leer y cuando se les dice lo provechoso de leer en lugar de aceptarlo se enojan. Por esta razón tenemos el tipo de muchachos que menciona al principio del artículo.